Viajar es la oportunidad perfecta para capturar momentos únicos e inolvidables a través de tu cámara. Sin embargo, aunque en Internet se pueden encontrar muchas guías relativas a viajes, no todas están enfocadas en las necesidades específicas de los fotógrafos. De hecho, planificar un itinerario fotográfico puede resultar un desafío, especialmente si se busca obtener los mejores resultados en términos de calidad de imagen y composición.
En este artículo obtendrás algunos consejos útiles y prácticos para la organización de tu ruta fotográfica, desde cómo seleccionar los mejores lugares hasta cómo aprovechar al máximo las condiciones de luz y clima. ¡Descubre cómo planificar el itinerario perfecto para conseguir las mejores fotografías en tus viajes!
1. ELECCIÓN DEL DESTINO
Puede que tengas claro el lugar al que quieres ir porque hayas visto un montón de fotos que te han dejado los dientes largos. Pero si no es el caso y aún no tienes decidido el destino, puedes ir a Skyscanner y poner la opción de explorar cualquier lugar para ver qué sitios están más baratos en las fechas que tengas disponibles.
Una vez decidido el destino, busca fotografías que te inspiren de ese sitio, ya sea en Google imágenes, Pinterest, Instagram, 500px, etc. De esta forma, tendrás una idea más clara de lo que quieres conseguir. Puedes cotillear los tableros de inspiración que he ido recopilando en mi Pinterest si haces clic aquí.
Una vez tengas en mente el tipo de fotografías que te gustaría hacer, te aconsejo que busques qué época es la adecuada para lograrlas. Por ejemplo, si querías visitar Islandia en julio con la idea de fotografiar auroras boreales, en este momento te darás cuenta de que tal vez no es la mejor temporada para hacerlo. En ese caso, tocará replantear el destino o las fechas de tu viaje, siempre que sea posible, o bien buscar alternativas sobre qué otras cosas interesantes podrías fotografiar en esa época.
2. UBICACIÓN EN EL MAPA
Si mientras buscabas inspiración has ido encontrando ciertos lugares que te llamen la atención, puedes ir guardándolos en tu Google Maps. También puedes añadir anotaciones del tipo de foto que quieres hacer allí, para recordar el por qué guardaste ese sitio (por ejemplo, si te interesa volar el dron en esa ubicación).
Ten en cuenta que realmente no te interesa guardar el lugar al que quieres hacer la foto, sino el sitio desde dónde la harás. Por ejemplo, por mucho que te guardes la Torre Eiffel, lo que deberías apuntarte son los mejores puntos de vista para fotografiarla (que por cierto, tengo un artículo sobre ello, si te interesa). Para encontrar estos lugares más específicos, puedes informarte en blogs o utilizar la web de Location Scout, por ejemplo.
Una vez hayas señalado todos los sitios que te gustaría fotografiar, tendrás una forma más visual de ubicarlos sobre el mapa, y ver qué puntos de interés están cercanos entre ellos y cuáles se alejan más. De esa forma, podrás decidir si es factible ver varios de ellos una misma mañana, por ejemplo, o si tendrás que renunciar a alguno que no te salga a cuenta por lejanía o falta de tiempo.
3. BÚSQUEDA DE INFORMACIÓN
Una vez decididos los lugares imprescindibles de tu viaje, es momento de buscar información más específica sobre ellos. Puedes buscar videos en Youtube o leer blogs como este para conocer los detalles de cada sitio, como por ejemplo si son de fácil acceso, si hay que pagar entrada, si se tiene que andar mucho hasta llegar, dónde aparcar, etc.
En este punto ya empezaría a crear un documento donde ir apuntando toda la información relevante que vayas encontrando. En mi caso utilizo las Presentaciones de Google, ya que además de añadir texto, es más visual y puedo poner las fotografías de referencia de los lugares en cuestión. Lo bueno de este método es que puedo redactarlo todo en el ordenador mientras voy indagando, y luego acceder desde Drive con el móvil incluso en pleno viaje, si quiero consultar algo. Además, también es fácil de compartir con el resto de tus acompañantes.
4. ORGANIZACIÓN DEL TIEMPO
Otra cosa importante a tener en cuenta es la hora a la que te gustaría visitar cada sitio, dependiendo de las condiciones que busques. Generalmente si quieres buena luz y poca gente, tocará madrugar, aunque hay veces que te interesará ir a una hora concreta por algún motivo. Por ejemplo, por la orientación de los pueblos de Cinque Terre, es mejor ir a la puesta de sol antes que a la salida, ya que las montañas hacen sombra durante el amanecer. Con Google Earth Pro puedes más o menos visualizar cómo afectará la luz a la zona que quieres fotografiar, e incluso poner la fecha en la que aproximadamente irás.
Otro punto a tener en cuenta, sobre todo si planeas fotografiar paisajes de costa, es el tema de las mareas. Puede que para revelar según qué sitios, el nivel del agua tenga que estar bajo, como es el caso de esta piscina natural en Fuerteventura:
Una vez decididos los lugares que quieres visitar al amanecer y al atardecer, tendrás que informarte de las horas en las que sale y se pone el sol en ese destino durante tus fechas, y ordenar en base a eso. Unas herramientas muy útiles para planificación son Photopills y The Potographer’s Ephemeris, sobre todo para fotografía nocturna o para calcular la posición del sol, la luna o la vía láctea respecto al sujeto que deseas fotografiar.
Toda esa información va a condicionar el orden en que vayas a ver las cosas, e incluso puede que tengas que volver a una zona más de una vez. Por ejemplo, es posible que para ir de un sitio a otro, pases de camino por otra localización que te interesa, pero tal vez en ese momento es pleno mediodía y tú buscabas unas condiciones de luz menos dura.
En esos casos, recomiendo hacer algo de location scouting antes que pasar de largo. Esto consiste en visitar los sitios que tienes pensado fotografiar de antemano, para ir reconociendo el terreno. Así puedes ir fichando ángulos y composiciones para estar preparado e ir más al grano cuando llegue el momento ideal.
A la hora de planificar cuánto tiempo estarás en cada localización, mejor tirar siempre a lo largo, ya que a veces cuesta pillarle el truco al sitio y no queremos ir con prisas. Por lo tanto, recomiendo ir con tiempo de sobra, por cualquier imprevisto que pueda pasar (como que te toque esperar a que acabe de llover o que haya mucha gente en tu encuadre). Es mejor tener paciencia y que te sobre el tiempo, piensa que así siempre puedes disfrutar de la localización una vez tengas tus fotos o mientras esperas a hacerlas…¡No todo consiste en sacar fotografías! Tómate tu tiempo para impregnarte de la esencia del lugar.
5. ALOJAMIENTO Y DEMÁS
Con toda esta información, tocaría buscar un alojamiento o más de uno, que te permita acceder a todos esos lugares de forma sencilla. En el caso de una ruta con varias estancias, hay que tener en cuenta qué días quieres madrugar para ir a qué sitios. En esos casos es cuando te interesa alojarte lo más cerca posible del lugar, si no quieres levantarte más temprano de lo que ya te va a tocar despertarte para llegar al amanecer.
Finalmente sólo te queda buscar información relativa al país (requisitos de entrada, si necesitas visado, vacunas necesarias, cambios de moneda, seguro de viaje, etc.) igual que lo harías con cualquier otro tipo de escapada.
CONCLUSIÓN
Como ves, planificar un viaje fotográfico requiere de una preparación cuidadosa y detallada para obtener los mejores resultados. Espero que los consejos y estrategias de este artículo te hayan ayudado a preparar tu próxima ruta de una manera efectiva, y a obtener el mejor rendimiento posible durante tu estancia. Si además te gustaría saber cómo mejorar tu fotografía de viajes, te recomiendo ojear este otro artículo que va muy ligado al que acabas de leer.
Recuerda que cada viaje es una oportunidad única para explorar nuevos lugares y capturar momentos únicos que quedarán plasmados para siempre en tus fotografías. ¡Que tengas un buen viaje!
